¿La terapia es para lo locos?
En que te ayuda un terapeuta
En realidad, cuando le preguntas a una persona que es un terapeuta muy pocos te saben responder y casi siempre lo relacionan con alguien que trabaja con locos.
Los más cercanos a ser terapeutas son los psicólogos, aunque en realidad hay formas de terapias que no son necesariamente o completamente psicológicas.
Se denomina terapeuta a aquel individuo que muestra habilidades logradas a través de la formación y de la experiencia, ya sea en una o más áreas de la asistencia sanitaria, y cuya labor predominante es ofrecer apoyo a los pacientes que lo demanden. El apoyo que brinda puede ser de diferentes índoles, normalmente, se encuentra especializado en una área determinada o función y se enfocará, ya sea junto a su cliente o paciente, en la consecución de las metas establecidas.
El universo de tipos de terapeutas que existen es bastante amplio, entre otros podemos citar a los siguientes: terapeutas ocupacionales, logopeda o terapeuta del lenguaje, acupuntura, fisioterapeuta, terapeuta del aparato respiratorio, terapeuta del suelo pélvico, terapeuta manual, osteópata y psicólogo y lejos de lo que se considera no son los locos los que necesitan terapia pues estos son atendidos por una ayuda especializada de otro tipo como es la psiquiatría, aunque a veces esta es apoyada por la psicoterapia.
De la misma forma muchas personas a lo largo de nuestra vida pasamos por momentos que no sabemos cómo enfrentar, en esos momentos es que necesitamos un terapeuta.
Pero sin embargo ¿por qué cuesta tanto asumir la necesidad de acudir a terapia? ¿Es más cómodo acudir al médico de cabecera y conformarnos con unas pastillas que no resuelven el problema, pero sí los síntomas? ¿Acaso es rechazo social? ¿O hablamos de rechazo a nosotros mismos?
Es posible que al leer las interrogantes anteriores te puedas identificar con una o varias y que sean parte de los motivos por los cuales no pides ayuda.
Por eso es que todos los miembros del grupo que conforma SERSOLACI queremos compartirte que, ir a terapias no es de locos, sino de cuerdos, tan cuerdos que piden ayuda cuando la necesitan y hablo de ti, de mí, de todos porque todos en algún momento hemos pasado un momento difícil.
Existen un sin número de razones para tomar terapia. A continuación, te mostramos alguna de estas razones:
Razones para tomar terapia
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Pérdida de control emocional (llanto, tristeza, irritabilidad, angustia, frustración…).
Te das cuenta que estás nervioso, duermes mal, estás intranquilo lo que conlleva que cambien tus ritmos diarios y tus hábitos. Quizás sufras de un periodo de ansiedad y no lo sabes.
Sabes que estás mal pero aun así no asumes que pasa algo y quieres continuar hacia delante afectándote en tus actividades diarias, la comunicación con tu pareja, la relación en tu familia…
Un terapeuta te puede acompañar a crear nuevas pautas que ordenen tu vida, te ayuden a encontrar tu camino y a sentirte de nuevo bien contigo mismo. Piensa que si tú estás bien, también estarán bien todos los que te rodean y a los que tienes preocupados.
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Problemas de concentración y atención en las tareas cotidianas
No le encuentras el sentido a lo que haces sin embargo te cuesta trabajo dejar de hacer lo que haces. Salir de la zona de confort es una de las acciones más reconfortantes que harás en tu vida, pero no lo hagas si no sabes cómo. Busca la ayuda de un profesional que te lleve de la mano para que te sientas seguro
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Incapacidad para afrontar los problemas (laborales, familiares…)
Te enfrentas a nuevos retos y sientes que el piso se te va debajo de los pies. Date cuenta que eres una persona que no lo sabes todo y que estas aprendiendo. Lo principal es que no estás solo te podemos acompañar a salir hacia adelante. Sé que casarnos, cambiar de trabajo, de vivienda, comprometernos… estas cosas dan miedo. Tomar decisiones conlleva consecuencias y no todo el mundo las afronta de la misma manera. Por eso una terapia puede ayudarte a abandonar viejas creencias que te limitan en tu desarrollo
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Incapacidad para mejorar tu calidad de vida.
Tienes costumbres, manías, malos hábitos o adicciones que no eres capaz de controlar. Tabaco, juego, drogas… quieres cambiar, pero no sabes cómo, acudir a terapia para acabar con tus adicciones será uno de los mejores regalos que te harás para el resto de tu vida.
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Liberarse de padecimientos
Sufres de enfermedades o síntomas somáticos (dolores de cabeza, fatiga, ritmo cardíaco acelerado, dolores articulares y musculares, sudoración…) no dudes en contactar un terapeuta vale la pena una valoración. En Sersolaci contamos con personal capacitado para acompañarte.