Seguramente has visto que los terapeutas usan figuras no solo para constelaciones familiares, sino para otro tipo de terapias, sobre todo con niños, pues a través del juego también se pueden identificar patrones y conductas de un apersona.
Los muñecos son un símbolo, una forma de exteriorizar un pensamiento que permite representar un concepto, una creencia o un suceso asociando ideas.
En síntesis, los símbolos son la representación de una cosa. A través de estas representaciones las personas buscamos expresar diferentes elementos de nuestra vida afectiva emocional.
Por esta razón, la simbolización es un concepto fundamental para cualquier terapia que tenga en cuenta la parte afectiva emocional de las personas, en tanto que remite directamente a los fenómenos del psiquismo humano.
Por eso las constelaciones familiares se puede realizar con muñecos que simbolizan la situación que se vive. Trabajar con muñecos es utilizar una herramienta de tipo simbólico.
Mediante el trabajo con muñecos en constelaciones familiares se representa de manera metafórica y visual la situación familiar o vivencial del grupo de convivencia expresado los conflictos inconscientes que la persona vive.
Es una especie de teatro donde de forma inconsciente la persona que constela proyecta sus conflictos y este acto le permite objetivar, exteriorizar múltiples dimensiones o aspectos de la realidad que vive y que hasta ese momento no son conscientes.
El hecho de poder mirar como un espectador externo permite ver y concientizar una realidad atemporal y no secuencial puesto que no importa el tiempo que tenga el conflicto pues al observarlo e identificarlo la persona lo revive en el momento y por ello lo puede liberar.
Por otro lado, trabajar con muñecos es un ejercicio privado e íntimo donde solo participan el terapeuta y el paciente. Este proceso es una forma de tomar responsabilidad de sus propios cambios y le ayuda a encontrar una buena posición o lugar de fuerza dentro de su sistema familiar, organizacional o socio – histórico.
Al trabajar desde esta perspectiva sistémica no sólo nos dedicamos a rastrear problemas familiares a través del tiempo y el espacio, sino que además vamos encontrando, recursos de afrontamiento para superar tanto dificultades personales como interpersonales.
Finalmente podría decir que el trabajo terapéutico con muñecos en las constelaciones familiares puede ser visto como una aventura, un viaje al inconsciente familiar o grupal. Aventura que vivimos junto a la persona que constela para que aflore la sombra sanado así las heridas del pasado y liberando el presente.
Inicia este viaje asistiendo como observador o directamente a constelar los viernes y sábados en Ser Solaci. Aquí más información.